La vez que Bolivia jugó con una camiseta celeste



Bolivia 1930 (Foto World Cup 1930 Project)
La selección boliviana de fútbol está muy cerca de cumplir 100 años de vida y entre las curiosidades que existen en su rico historial está la vez que tuvo que vestir de celeste en el primer Mundial de fútbol que se disputó en Uruguay.
Bolivia jugó sus primeros partidos internacionales en 1926 con la camiseta de color blanca. Era un color neutro que podía evitar confrontaciones en los equipos locales de aquella época.
Las selecciones del resto del continente ya tenían los colores de sus banderas en sus camisetas, pero Bolivia decidió comenzar a jugar sus partidos con camisas blancas, pantalones negros y medias negras.
En 1930 acude a la invitación de Uruguay para ser parte del primer Mundial de fútbol. El equipo boliviano se preparó casi un mes antes de asistir a la cita en suelo uruguayo.
Su primer juego fue contra Yugoslavia, perdió 4-0 pese a que generó una gran cantidad de ocasiones de gol y pudo dar el primer batacazo del Mundial. En aquel cotejo Bolivia utilizó la camiseta blanca y en el pecho de los jugadores se tenía una letra que juntos formaban la frase “Viva Uruguay”.
Para el segundo cotejo contra Brasil no usó esa indumentaria, utilizó su tradicional camiseta blanca. Sin embargo su rival también usaba en esos años el color blanco como camiseta.
A los pocos minutos de iniciado el cotejo se escuchó una silbatina proveniente de los miles de asistentes al estadio Centenario. La gente reclamaba que era difícil saber quién era de Brasil y quién era de Bolivia porque ambos equipos salieron con camisetas blancas y no tenían otro uniforme.
Los organizadores decidieron prestar las camisetas de Uruguay a Bolivia cuyos jugadores tuvieron que cambiarse en un costado de la cancha.
Al volver al terreno de juego se escuchó un gran aplauso y vítores para los jugadores bolivianos que tenían los colores de Uruguay. Por segunda vez Bolivia había conquistado a los hinchas locales, pero pese a ese gesto terminó derrotada por 4-0 ante los brasileños.


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